La boda de Karla Tarazona y Christian Domínguez pudo salirse de control, pues a las afueras de la residencia donde se desarrolló el matrimonio, ubicada en el distrito de Chorrillos, un grupo de curiosos alteró el orden. Al promediar las 8:30 de la noche, en las afueras de la casa que recibía a los novios y a los invitados, se dieron cita decenas de curiosos, entre figurettis y madres de familia con hijos en brazos, que quisieron ser partícipes del momento feliz de ambos artistas sin medir las consecuencias.
↧